Las festividades del “Círio de Nazaré” dan comienzo todos los años a partir del mes de agosto y su punto culminante es la gran procesión celebrada en honor de Nuestra Señora de Nazaret el segundo domingo de octubre de cada año, con motivo del traslado de una imagen de madera de la Virgen María desde la catedral de la Sé hasta la plaza del Santuario de Nazaret en la ciudad de Belem. Después de este acto religioso, las festividades se prolongan por espacio de dos semanas más. Prácticamente todos los vecinos de la ciudad participan en la procesión y grandes muchedumbres de peregrinos acuden desde todo el Brasil para participar en esta concentración religiosa, que es una de las más grandes del mundo. Las festividades comprenden numerosos elementos que reflejan el carácter multicultural de la sociedad brasileña: prácticas culturales y culinarias tradicionales de la Amazonia; y objetos artesanales como los juguetes fabricados con madera de la variedad de palma local. La mezcla de lo sagrado y lo profano hace que este evento religioso tenga también facetas estéticas, turísticas, sociales y culturales. El uso de barcos en la procesión tiene un carácter simbólico ya que Nuestra Señora de Nazaret es la santa patrona de los marineros. Los fieles levantan altares en casas, tiendas, bares, mercados y edificios públicos de toda la ciudad. La transmisión de esta práctica cultural tradicional se efectúa en el seno de las familias, cuando los padres asisten a los festejos acompañados por sus hijos pequeños y adolescentes. Para muchos, la festividad del Círio de Nazaré es una ocasión para retornar al hogar y reunirse con la familia, y para otros es una oportunidad para organizar manifestaciones
Créditos fotos el “Círio de Nazaré”: procesión de la imagen de Nuestra Señora de Nazaret en la ciudad de Belem, Brasil
Foto: Adriano Chedieck, 2008
Fuente: Web UNESCO